Lo que Billy Graham dijo de sí

Billy Graham (William Franklin Graham, Jr.), nació en Charlotte, North Carolina, Estados Unidos el 7 de noviembre de 1918, y después de una larga y fecunda vida fue promovido a la gloria, en el descanso eterno de los santos, el 21 de febrero de 2018, en Montreat, North Carolina (1). Muchos le consideran el líder cristiano evangélico más influyente del siglo XX. Organizó cuatrocientas convenciones en estadios y salas de concierto (3), y predicó a más personas que ningún otro hombre en la historia: tres millones y medio recibieron a Cristo como Salvador personal bajo su ministerio que alcanzó en extensión a doscientas quince millones de personas en ciento ochenta y cinco países (2), donde sus cruzadas evangélicas hicieron historia. Pionero en el uso de las tecnologías de la comunicación en función del evangelio, fue uno de los primeros y más eficaces tele-evangelistas del mundo; llegó a dos mil millones de tele-espectadores. Dejó un legado de treinta libros que fueron traducidos a cuarenta idiomas (3).

Reconocido y honrado por evangélicos y católicos, Billy Graham fue confidente personal de reyes y consejero de jefes de estado. Como capellán de la Casa Blanca asistió a todos los presidentes de los Estados Unidos desde los convulsos tiempos de Harry Truman (1884-1972), trigésimo tercer presidente de los Estados Unidos (1945-1953). Su influencia política fue enorme. Fue, de hecho, el primer predicador occidental que fue más allá de los límites del telón de acero, en plena guerra fría. Las encuestas Gallup lo situaron en la séptima posición mundial entre los personajes más reconocidos y admirados del siglo XX. Perdura en la memoria de muchos como “el pastor de América” (2).

A su muerte las más altas personalidades del gobierno de los Estados Unidos pronunciaron sentidas palabras; James E. Carter, trigésimo noveno presidente de los Estados Unidos, declaró: “Rosalynn y yo estamos profundamente tristes al enterarnos de la muerte del reverendo Billy Graham. Incansablemente propagó un mensaje de fraternidad y esperanza, dando forma a las vidas espirituales de decenas de millones de personas en todo el mundo” (4). George H. W. Bush (1924-2018), cuadragésimo primer presidente de los Estados Unidos, declaró, a través de un comunicado: “…Billy no solo llegó al corazón de los cristianos sino también de personas de todas las religiones (…). Tengo el privilegio de haberlo tenido como amigo personal (...). Fue un mentor para muchos de mis hijos” (3). William J. Clinton, cuadragésimo segundo presidente de los Estados Unidos afirmó: “Hillary y yo estamos tristes por la muerte de nuestro amigo Billy Graham, uno de los más importantes líderes religiosos en la historia estadounidense” (4). George W. Bush Jr., cuadragésimo tercer presidente de los Estados Unidos, recordó, escribiendo para el Wall Street Journal:

La obra de Dios dentro de mí comenzó en serio con el alcance de Billy (…). Su cuidado y sus enseñanzas fueron el verdadero comienzo de mi caminar en la fe y el comienzo del fin de mi alcoholismo. No habría podido dejar el alcohol por mi cuenta” (…) Me habló de una de las lecciones más fundamentales de la Biblia: uno debe esforzarse por ser mejor, pero todos somos pecadores que nos ganamos el amor de Dios no a través de nuestras buenas obras, sino a través de Su gracia. Era un concepto profundo, uno que no entendí completamente ese día. Pero Billy había plantado una semilla. Su cuidadosa explicación hizo que el suelo fuera menos duro y las zarzas menos espesas.

Poco después de regresar a Texas, llegó un paquete de Billy. Era una copia de The Living Bible (…), incluido una referencia a Filipenses 1: 6: “…estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo” (…).

Aquellos de nosotros que tuvimos la suerte de conocer a Billy Graham nos beneficiamos de sus profundas convicciones y ejemplo personal, su sabiduría y humildad, su gracia y pureza de corazón (…). Sabíamos que su vida era un regalo del Todopoderoso. Y me alegro de que ahora esté en la compañía de Dios, a quien amó tanto y sirvió tan bien (5).

Barak H. Obama, cuadragésimo cuarto presidente de los Estados Unidos, expresó que fue: “un humilde servidor que oró por tanta gente y quien, con sabiduría y gracia dio esperanza y orientación a generaciones de estadounidenses” (3). Finalmente, Donald J. Trump, cuadragésimo quinto presidente de los Estados Unidos, máximo dignatario norteamericano al momento de la partida de Billy Graham a la eternidad, en el comunicado oficial de la Casa Blanca, declaró:

Melania y yo nos unimos a millones de personas en todo el mundo en el luto por el fallecimiento de Billy Graham. Nuestras oraciones están con sus hijos, nietos, bisnietos y todos los que trabajaron estrechamente con el Reverendo Graham en su ministerio de toda la vida (…). Fue una de las figuras imponentes de los últimos cien años: un héroe estadounidense cuya vida y liderazgo realmente le valieron el título de “Embajador de Dios” (…). Melania y yo tuvimos el privilegio de conocer al Reverendo Graham y su extraordinaria familia durante los últimos años, y estamos profundamente agradecidos por su amor y apoyo (4).

Esto fue lo que dijeron, con no poca justicia, tan significativas personalidades. Es por eso verdaderamente sacudidor leer lo que declaró Billy Graham, acerca de sí, cuando fue entrevistado por el afamado presentador de televisión Larry King, a poco de haber cumplido el célebre evangelista los ochenta años. King le comentó sugerentemente: “Debe ser gratificante para usted mirar hacia atrás en su vida y no tener que vivir con arrepentimientos”. La respuesta de Graham sorprendió al presentador televisivo, a toda la teleaudiencia y por extensión al mundo. Él dijo: “Soy el mayor fracaso de todos los hombres. Estuve demasiado con los hombres y muy poco con Dios. Estuve demasiado ocupado con reuniones de negocios e incluso realizando servicios. Debería haber estado más con Dios, y la gente habría sentido la presencia de Dios sobre mí cuando estaban conmigo” (2).

Nada es más importante para ti y para los que te rodean en el ministerio que la influencia visible de Dios. Cerciorémonos acerca de lo que somos, de quién es Aquel que nos llamó, y del incomparable valor de su presencia, y luchemos por aprender de la lección que nos dejó Billy Graham, desde su vastísima experiencia, acerca de lo que es verdaderamente importante en la vida de todo siervo de Dios, especialmente del líder: el tiempo a solas con Dios.

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(1) Randall Balmer. Britannica Encyclopedia. “Billy Graham. American evangelist”. https://www.britannica.com/biography/Billy-Graham Accedido el 28 de agosto de 2020, 3:01 PM.

(2) Bert Farias. Charisma News. “Why Billy Graham Considered Himself a Failure”.  https://www.charismanews.com/opinion/the-flaming-herald/54951-why-billy-graham-considered-himself-a-failure Publicado: 5 de febrero de 2016. Accedido el 28 de agosto de 2020, 2:48 PM.

(3) AFP. El Tiempo. “¿Quién era Billy Graham, el pastor evangélico más popular del mundo?”. https://www.eltiempo.com/mundo/eeuu-y-canada/perfil-del-pastor-evangelico-billy-graham-185954 Publicado: 22 de febrero 2018. Accedido el 28 de agosto de 2020, 3:40 PM.

(4) Voz de América – Redacción. “Trump: ‘Billy Graham fue realmente único’".  https://www.voanoticias.com/estadosunidos/muere-billy-graham-evangelista-presidentes Publicado: 21 de febrero de 2018. Accedido el 28 de agosto de 2020, 4:14 PM.

(5) David Roach. Baptist Press. “George W. Bush: Billy Graham ‘changed my life’”. https://www.baptistpress.com/resource-library/news/george-w-bush-billy-graham-changed-my-life/ Publicado: 26 de febrero de 2018. Accedido el 28 de agosto de 2020, 4:34 PM.