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lunes, 22 de abril de 2024

En total desacuerdo con Fernando Birri y Eduardo Galeano

El célebre escritor y periodista uruguayo, Eduardo Galeano (1940-2015) contó una vez:

 

...Me ocurrió en Cartagena de Indias, hace ya algún tiempo, cuando estaba en la Universidad dando una charla junto con un gran amigo, un director de cine argentino, Fernando Birri, y entonces (...) un estudiante se levantó y preguntó: «¿Para qué sirve la utopía?» (...), y él contestó estupendamente, de la mejor manera; dijo que la utopía está en el horizonte, y dijo: «Yo sé muy bien que nunca la alcanzaré, que si yo camino diez pasos ella se alejará diez pasos; cuanto más la busque menos la encontraré, porque ella se va alejando a medida que yo me acerco. Buena pregunta, ¿no?, ¿para qué sirve? Pues la utopía sirve para eso, para caminar...» (1).

 

Parecen palabras ingenuas con un efecto inspirador, casi poético, si no fuera porque la humanidad ya conoce a dónde la llevó caminar en la dirección en que la empujaron las utopías, el costo de andar por un camino errado. En nombre de las utopías se instrumentaron todas las ingenierías sociales, esas que cercenaron la vida de miles de millones de personas. Imperios, revoluciones, totalitarismos...

Es tarde para hablar así. La humanidad ya aprendió que de utopías está empedrado el camino al infierno.

En total desacuerdo con Fernando Birri y Eduardo Galeano. En total desacuerdo con las utopías.

 

 

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(1)     Eduardo Galeano. «¿Para qué sirve la utopía?» https://fb.watch/rBrq2EH7it/ Accedido: 21 de abril de 2023, 7:49 p.m.




domingo, 21 de abril de 2024

Qué síntesis son los pueblos

Frente a los pronunciamientos contemporáneos de los que exigen a España un pedido de perdón con relación a hechos que ocurrieron en México hace quinientos años, o de los que, en el otro extremo, reclaman ser herederos ideológicos de los colonizadores, qué comprensión muestran las palabras del periodista y escritor mexicano Salvador Borrego (1915-2018), cuando describió su percepción de lo que es la síntesis histórica en la construcción de un pueblo. Él escribió:

 

No somos prolongación del Imperio Azteca y es torpe e irreal que nos juzguemos desposeídos de sus logros. Aquéllos no éramos nosotros, aunque algo llevamos de ellos. E igualmente ocioso es suspirar por la grandeza de la colonia (virreinal); México fue entonces el primer centro político, económico y cultural de América, pero principalmente por obras de españoles, y aquéllos tampoco éramos nosotros, aunque algo llevamos de ellos. Con el nombre de México no podemos designar ni al Imperio Azteca que sucumbió con la Gran Tenochtitlán, ni a la Nueva España que desapareció con la Independencia. México es la resultante de esas dos fuerzas y su evolución hacia la plenitud se realiza a medida que sus hijos adquieren conciencia de su nueva nacionalidad [1].

 





[1] Salvador Borrego E.  América Peligra: 600 años de azarosa historia. 24 ed. México, 2010, p. 8.



sábado, 13 de abril de 2024

Mucho han vivido...

Mucho han vivido las madres. No les cuente la edad según el calendario; ellas vivieron los días de sus hijos, sus esposos...

Mucho viven el médico verdadero, el estadista dedicado, el líder auténtico.

Mucho han vivido los que intercedieron por otros, los que llevaron cargas, sinsabores o sueños, y fueron donde Dios, en oración, en favor de sus amigos, con el corazón embargado de tristeza, a la búsqueda de una vida mejor. Preciados intercesores; aprendieron a orar por algo más que el pan propio.  

Ama Dios a estos seres de larga vida, y los busca como preciadas herramientas de bien: «Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra...» (Ez. 22:30).

Mucho vivió el Señor Jesús. No resuma en treinta y tres años su vida. Él llevó al mundo en la Cruz. Sus días no pueden ser contados; es, de hecho, el Eterno...



domingo, 7 de abril de 2024

Fueron sus lágrimas

Mucho más que las de Jeremías, las lágrimas de David llenan la Biblia; humedecen todavía los salmos que escribió.

Pocas personas impactaron más la historia siguiente de sus pueblos, o llegaron más lejos en respaldo y bendición. A nadie hizo Dios promesas más grandes: «Hice pacto con mi escogido; juré a David mi siervo, diciendo: para siempre confirmaré tu descendencia, y edificaré tu trono por todas las generaciones» (Sal. 89: 3, 4).

¿Dónde estuvo el secreto de aquel inamovible rey? ¿Cuál fue el egregio camino seguido para tan resonante victoria? ¿Sus destrezas militares? ¿Sus hábiles alianzas? «Pasos a seguir», «claves secretas», «métodos para llegar a la meta»; ¿le suenan familiares estas expresiones? ¿Tienen algo que ver con la vida del quien fuera el regio militar y a la par el «dulce cantor de Israel»? (II Sa. 23: 1). ¿Qué le llevó a ser el más grande rey que tuviera tan significativo pueblo? Hay una sola respuesta: sus lágrimas. Frente a los graves desvaríos de su vida, desatinos, mentiras, violencias, ellas expresan una sola cosa: el más genuino arrepentimiento. Este último vino seguido de aprobación, restitución y triunfo.

Tres consecuencias tuvieron para David aquellas lágrimas: «se fortaleció en Jehová su Dios» (I Sa. 30: 6); encontró siempre «el camino de regreso» (Lc. 15: 18); fue aprobado por Aquel que es el único Juez de todas las acciones de los hombres (Gn. 18: 25).

Todos pueden repetir hoy de memoria el Salmo 23, aun los impíos. Sepa, sin embargo, que el hombre que escribió aquellas palabras supo hacer algo más que arrancar del arpa notas liberadoras, lanzar la piedra infalible a la frente de Goliat, derrotar filisteos y amalecitas, o expandir las fronteras de Israel a límites no alcanzados; más allá de esto supo hacer algo determinante: llorar con el más genuino arrepentimiento en la presencia de Dios. Allí fue aprobado.



domingo, 31 de marzo de 2024

No, no has terminado

No, no has terminado. Como siervo de Dios tu camino es otro y su final no lo determinan el calendario, ni las políticas de jubilación; ni siquiera lo determinas tú; mucho menos las marginaciones de los que apenas saben lo que es un llamamiento.
No, no has terminado. Dios y solo Dios decide el instante en que caerá el telón que cierra el ministerio. No puedes siquiera predecir la dimensión de bendición que serás y recibirás. «Independientemente de tu edad, el resto de tu vida puede ser lo mejor de ella...»[1]. Así lo remarcó Rick Warren
«Pedid a Jehová lluvia en la estación tardía. Jehová dará relámpagos, y os dará lluvia abundante, y hierba verde en el campo a cada uno» (Zac. 10: 1).
No, no has terminado. Así pensaba Elías cuando se le dijo: «largo camino te resta» (I Re. 19:7).

 
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[1] Rick Warren. Una vida con propósito. Florida: Editorial Vida, 2003,  p. 309.


domingo, 28 de enero de 2024

"Dios no cambia" (Nm. 23:19).

Predicación: «Dios no cambia» (Nm. 23:19). Mensaje predicado por el Rev. Dr. Octavio Ríos Verdecia, en la mañana del 28 de enero de 2024, Templo «Casa de Oración», Asambleas de Dios, en Longview, Texas, Estados Unidos. Respuesta a una amable invitación de los Pastores Agustín y Mere Campos. Servicio completo. Medios audiovisuales de "Casa de Oración". Usado con permiso. 
A su alcance en:



miércoles, 17 de enero de 2024

Puertas Abiertas: Lista mundial de persecución religiosa, 2024

La organización internacional Puertas Abiertas publica hoy, 17 de enero de 2024, su lista actualizada de persecución mundial del cristianismo. La célebre organización internacional, de acuerdo con los informes que recibe (asesinatos, encarcelamientos, ataques a las iglesias) aplica tres tipos de puntajes; estos son: Alto (41-60 puntos). Muy alto (61-80). Extremo (81-100).

La lista se encuentra a su alcance y disponible en:

https://www.puertasabiertas.org/es-ES/persecucion/lmp/

Este es el orden de la persecución cristiana publicado hoy: 

1.       Corea del Norte

2.      Somalia

3.      Libia

4.      Eritrea

5.      Yemen

6.      Nigeria

7.      Pakistán

8.     Sudán

9.      Irán

10.  Afganistán

11.   India

12.  Siria

13.  Arabia Saudí

14.  Mali

15.  Argelia

16.  Irak

17.   Myanmar

18.  Maldivas

19.  China

20. Burkina Faso

21.  Laos

22. Cuba

23. Mauritania

24. Marruecos

25. Uzbekistán

26. Bangladés

27.  Níger

28. República Centroafricana

29. Turkmenistán

30. Nicaragua

31.  Omán

32. Etiopía

33. Túnez

34. Colombia

35. Vietnam

36. Bután

37.  México

38. Egipto

39. Mozambique

40. Catar

41.  República Democrática del Congo (RDC)

42. Indonesia

43. Camerún

44. Brunéi

45. Comoras

46. Tayikistán

47.  Kazajistán

48. Jordania

49. Malasia

50. Turquía 

Por veinte años, la llamada República Popular Democrática de Corea, que no tiene nada de «popular», mucho menos de «democrática», ocupó el primer lugar en la Lista Mundial de la Persecución (LMP), como el país más hostil del mundo al Evangelio. En la lista del 2022 hubo una temporal discontinuidad: pasó a ser el número dos, tras sufrir Afganistán la toma de control de los talibanes en el verano del 2021. En el período de reportaje de la LMP de 2023, tras la emigración forzada de cristianos de Afganistán, Corea del Norte volvió a colocarse a la cabeza. Este año, 2024, se restablece el patrón habitual, con Corea del Norte de puntera en la tenebrosa lista. Dura cosa ha de ser a ese régimen «dar coces contra el aguijón» (Hch. 9: 5).