Translate

domingo, 5 de marzo de 2023

El delicado tema de la Cruz en boca de John Stott

En la Navidad de 1985, aquel que, al decir de Billy Graham, fue el más grande maestro bíblico del siglo XX (¡lo conocí!), escribió:

 

El atrevimiento de escribir (y de leer) un libro acerca de la cruz conlleva un enorme riesgo de presunción. Esto se debe en parte a que lo que realmente sucedió cuando «Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo» es un misterio cuyas profundidades seguiremos explorando durante toda la eternidad; y en parte porque sería impropio pretender adoptar una actitud de fría objetividad al contemplar la cruz de Cristo. Porque nos guste o no, estamos involucrados en la cuestión. Nuestros pecados lo llevaron a la cruz. De modo que, lejos de adulamos, la cruz socava nuestros intentos de autojustificación. Sólo podemos contemplarla con la cabeza inclinada y el espíritu contrito. Y allí permanecemos hasta que el Señor Jesús hable a nuestros corazones ofreciéndonos perdón y aceptación, y entonces, atrapados por su amor y henchidos de gratitud, nos dirigimos al mundo para vivir nuestra vida dedicados a su servicio (1).

 

Qué comprensión de un tema que es tan delicado. Resumidamente nos está diciendo a todos que:

 

La Cruz es un misterio.

La Cruz nos involucra.

La Cruz mutila toda autojustificación.

La Cruz nos convoca.

La Cruz nos envía a la vida.

  

 

__________

 

 

(1) John Stott. La cruz de Cristo. Buenos Aires, Argentina: Ediciones Certeza, 1986, pp. 16, 17.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Su comentario a este artículo se recibe con respeto y gratitud.