Solo a alguien que no vio a un adulto en vida útil todavía, incapaz ya de hacer un cálculo matemático elemental.
Solo a alguien que no estuvo en una sala de psiquiatría, como visitante, o tal vez como paciente, ¿por qué no?
Solo a alguien que no vio la brutalidad de un accidente de tránsito, con sus hórridas mutilaciones, con su cruda destrucción.
Solo a alguien que no vio a una madre en el hospital, veinte días y veinte noches, al lado de la cama de su hijo, irreversiblemente descerebrado.
Solo a alguien que no vivió una escena de crimen o de robo con violencia.
Solo a alguien que no estuvo en una cárcel.
Solo a alguien muy ignorante.
Solo a alguien muy irresponsable.
Solo a alguien muy extraño.
Solo a alguien así, se le ocurre legalizar la droga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Su comentario a este artículo se recibe con respeto y gratitud.