Es extraño, pero casi no pude dormir aquella lejana noche del 31 de octubre de 1984. Indira Gandhi, la primera ministra de la India, había sido asesinada a tiros por dos de sus guardaespaldas sijs. Ellos se vengaban por la Operación Estrella Azul que ella ordenó como una acometida militar contra el Templo Dorado de Amritsar; buscaba desalojar a militantes sijs. Fue una acción de guerra y hubo muertes en ambos lados (1). Para entonces no entendí las motivaciones políticas del magnicidio, pero me trastornó indescriptiblemente no poder concebir que alguien le disparara a una mujer.
Cinco años después, el 25 de diciembre de 1989, ¡en plena Navidad!, bajo cargos de genocidio demostrado, un tribunal militar extraordinario ordenó el fusilamiento de Elena Ceauşescu en Târgovişte, Rumanía (2). Con más edad podía entender mejor; aquella mujer estaba muy lejos de ser un ángel, pero su fusilamiento igualmente me pareció espantoso por el hecho de que se trataba de otra mujer.
Tendría que saber que la historia se llena de espantos así: Juana de Arco fue quemada en la hoguera el 30 de mayo de 1431, en la Place du Vieux-Marche de Ruán, Francia (3); tenía 19 años. María Antonieta fue decapitada el 16 de octubre de 1793, en la Plaza de la Revolución, actual Plaza de la Concordia, en el romántico París de Francia (4). Los alemanes fusilaron a la enfermera inglesa Edith Cavell el 12 de octubre de 1915; ella ayudaba a escapar a un lugar seguro a los miembros de las tropas aliadas prisioneros en Bélgica (5). El 5 de agosto de 1939, bajo cargos de rebelión, los franquistas fusilaron a las Trece Rosas de España, trece jóvenes madrileñas; tenían entre 18 y 29 años (6). Dios...
De espanto en espanto, a las 2:00 p. m. de este miércoles, 26 de noviembre de 2025, víspera del Día de Acción de Gracias, en el centro mismo de Washington D.C., en la concurrida Farragut Square, a pocos metros de la Casa Blanca, Rahmanullah Lakanwal, un refugiado afgano, disparó resueltamente a dos miembros de la Guardia Nacional. Uno de ellos, Andrew Wolfe, lucha por su vida en estado crítico. El otro agente, Sarah Beckstrom, una joven de solo 20 años, murió al día siguiente (7). Apenas comenzaba a vivir. Se había ofrecido como voluntaria para trabajar en el significativo Thanksgiving a fin de que otros pudieran estar en casa con sus familias. Guardaba con su compañero la seguridad del lugar cuando vio de pronto cercenada su vida en cumplimiento del deber. Descansa en paz, Sarah. Puedas hallar «misericordia cerca del Señor en aquel día» (II Tim. 1:18).
Donald Trump, el más sincero y directo de los presidentes norteamericanos de toda la historia, llamó a Lakanwal «animal» (7). Su afirmación es comprensible y pertinente, pero inexacta; los animales no tienen sentido moral; actúan por instinto. Si el león está saciado y no se siente amenazado, le verá pasar a usted frente a él por la espaciosa sabana y no lo atacará. Ese tirador insulso, frustrado gatillero de orilla, no tenía hambre, no se sentía amenazado por aquellos humildes guardias de seguridad; a diferencia del león, él tenía sentido moral... Creo que ya usted puede entender: aquel afgano fue incomparablemente peor que un animal.
¿Cómo alguien dispara a una mujer? Muere baleada a quemarropa una joven y vuelvo a mis espantos ancestrales de los que no me recupero en la séptima década de la vida por más que releo. Maestro Borges, tu magna Historia universal de la infamia debe ser reescrita.
Qué pensar, qué recordar, qué decir... Entre las muchas digresiones de pensamientos y recuerdos que producen noticias así, vi de pronto aquella lejana escena, evocada en los libros de historia de las contiendas anticoloniales cubanas, en aquella que llamaron la Guerra de los Diez Años. El mayor general Antonio Maceo y Grajales determinó en Consejo de Guerra el fusilamiento de una mujer, bajo cargos de espionaje y ordenó a su hermano, el mayor general José Maceo la dirección del pelotón de fusilamiento. Este estalló: «¡Yo no fusilo mujeres!». La reacción explosiva del general Antonio ante el desacato, y la tensión que se creó en la escolta no lograron nada. El general José se expuso a un posible consejo de guerra y a la ira de aquel que era el segundo hombre de la guerra, el rudo y temible Titán de Bronce pero, por más que se cargaron los aires de violencia y muerte, no cumplió aquella orden.
¿Se trataba de una debilidad militar de José Maceo? ¿Ese que respetó la vida de una mujer por más ruinosa que fuera su conducta era un ser quebradizo o frágil? Aquel a quien sus compañeros de armas llamaron «el León de Oriente» era el más fiero de los generales cubanos. Agresivo, movido temerariamente por compulsiones que hacían temblar su mundo en derredor, era capaz de darle un escándalo al cura en su propia boda. Explosivo, anárquico, indisciplinado, era la figura de quien menos se podía esperar un gesto de hidalguía. Le temían los españoles y le temían los cubanos. Pero ninguna descripción o apelativo alcanza a ponderar su valor como lo hizo un pequeño comentario, casi casual, pasado por alto muchas veces tras la lectura de las crónicas de las guerras y los manuales de historia. Tuvo lugar en boca de su hermano, el general Antonio. Estuvo en relación con la Batalla de Peralejo. Esta se libró el 13 de julio de 1895, cerca de Bayamo, Oriente cubano. Enfrentó directamente al general Antonio Maceo, al frente de las fuerzas mambisas, con el capitán general español en la isla, Arsenio Martínez Campo. Resultó en un triunfo rotundo de las tropas cubanas. Las emboscadas fuerzas españolas estuvieron a punto de no poder siquiera retirarse. En el epílogo de aquella memorable contienda, los miembros del estado mayor del general Maceo le oyeron decir en voz baja, en el tono en que se dicen los más profundos reproches: «Si yo llego a tener conmigo a José, yo cojo a Martínez Campos...».
Nada más por decir.
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(1) Editorial. Association for Diplomatic Studies and Training. «El asesinato de Indira Gandhi y los disturbios antisij de octubre de 1984».
https://adst.org/2015/10/indira-gandhis-assassination-and-the-anti-sikh-riots-october-1984/ Accedido: 29 de noviembre de 2025, 5:12 p. m.
(2) Redacción. BBC News Mundo. «"Yo ya sabía que iba a ser quien mataría a Ceausescu": la revolución que llevó al fusilamiento del líder comunista de Rumania el día de Navidad».
https://www.bbc.com/mundo/articles/c80vlzxe0ldo Accedido: 29 de noviembre de 2025, 5:35 p. m.
(3) Editores. This Day in History. «Juana de Arco es quemada en la hoguera por herejía».
https://www.history.com/this-day-in-history/may-30/joan-of-arc-martyred Accedido: 29 de noviembre de 2025, 5:35 p. m.
(4) Redacción. National Geographic. «Cómo murió María Antonieta, la reina que perdió el poder a causa de la Revolución Francesa».
https://www.nationalgeographicla.com/historia/2024/10/como-murio-maria-antonieta-la-reina-que-perdio-el-poder-a-causa-de-la-revolucion-francesa Accedido: 29 de noviembre de 2025, 5:52 p. m.
(5) Redacción. British Red Cross. «Recordando a Edith Cavell: una valiente enfermera de la Primera Guerra Mundial».
https://www.redcross.org.uk/stories/our-movement/our-history/remembering-edith-cavell-a-brave-first-world-war-nurse?utm_source=chatgpt.com Accedido: 29 de noviembre de 2025, 6:02 p. m.
(6) Alice Tusa. La clé des langues. «Las Trece Rosas, unas representantes de la violencia ejercida por el régimen franquista sobre las mujeres “rojas”».
https://cle.ens-lyon.fr/espagnol/civilisation/histoire-espagnole/guerre-civile-et-dictature/las-trece-rosas-unas-representantes-de-la-violencia-ejercida-por-el-regimen-franquista-sobre-las-mujeres-201crojas201d Publicado: 11 de abril de 2020. Accedido: 29 de noviembre de 2025, 6:02 p. m.
(7) Redacción. BBC News Mundo. «Una agente de la Guardia Nacional muere tras un tiroteo cerca de la Casa Blanca en Washington D.C.»
https://www.bbc.com/mundo/articles/cx2ewj93y6no Accedido: 29 de noviembre de 2025, 7:54 p. m.
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